Cuando se acaba de cumplir esta semana el octavo aniversario de la Agenda 2030, Smarkia reflexiona sobre la descarbonización de la industria
Un artículo de opinión de Carlos Gascón, CIO y CTO de Smarkia, publicado por la revista de la Energía de El Economista reflexiona sobre la palanca que supone el PERTE de descarbonización industrial para el sector de la eficiencia energética.
En un contexto marcado por la transición energética, Gascón asegura que “uno de los aspectos más relevantes de la misma es la eficiencia energética. A nadie se le escapa que, para luchar contra el cambio climático y avanzar hacia la descarbonización de nuestra sociedad, optimizar la gestión de nuestro consumo energético es un objetivo clave”.
Para ello, asegura, “debemos buscar la fórmula perfecta que nos permita reducir el consumo de energía sin que esto afecte a nuestra actividad económica y sin que nuestros negocios o industrias se puedan ver impactados negativamente”.
El primer paso en la gestión de este PERTE va a tener lugar a finales de este mes de septiembre o, como máximo, a principios de octubre, según lo anunciado por Luis Colunga -comisionado especial para este PERTE-. Concretamente, en ese momento se lanzará la primera de las cuatro líneas que engloba esta ayuda, la destinada a la descarbonización de la industria manufacturera, que contará con fondos europeos Next Generation y cuyo monto asciende a cerca de 400 millones de euros. Este PERTE se presenta, así, como una prometedora herramienta para transformar la manera en la que nuestra industria gestiona su consumo energético y avanzar hacia la tan deseada descarbonización.
El PERTE de descarbonización
El Consejo de Ministros aprobó el 27 de diciembre de 2022 el PERTE de descarbonización industrial de 2022 el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de descarbonización industrial, cumpliendo con un compromiso de apoyar a la industria en su transición hacia modelos y procesos más respetuosos con el medio ambiente y contribuir al objetivo de neutralidad climática en 2050
El proyecto nació con una inversión pública prevista de 3.100 millones de euros y con el objetico de movilizar hasta 11.800 millones de euros de inversión total. Las inversiones en descarbonización y modernización de la industria manufacturera impulsadas a través de este PERTE permitirán incrementar la competitividad del sector en alrededor de un 10% y supondrá la creación de unos 8.000 empleos.
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